Belleza silvestre que florece en lo inesperado. Una flor que desafía el paisaje y deja huella con su presencia sutil y poderosa.
Frescura empolvada, pura elegancia. Una salida luminosa y etérea que envuelve la piel con suavidad.
Una caricia cálida y envolvente. El corazón gourmand de la fragancia: suave, adictivo, delicadamente exótico.
Sensualidad que permanece. Una base cálida, profunda y magnética que firma la fragancia con carácter.